María Peláez 

Málaga 13 noviembre 1977

 

Licenciada en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y Diplomada en Magisterio de Educación Física, María Peláez es la cuarta de cinco hermanos, hija de Esperanza (enfermera) y Miguel Ángel (abogado). María nació y creció siguiendo con admiración la estela de sus hermanas mayores. Así llegó a la piscina con 5 años, descubriendo el encanto e influjo del agua, medio en el que María se sentiría literalmente "como pez en el agua".

 

Desarrolló toda su carrera deportiva compitiendo por el Real Club Mediterráneo de Málaga. Su etapa de formación como nadadora comenzó allí, con Antonio Luis Gómez como entrenador y rodeada de jóvenes compañeros llenos de ilusión y pasión por lo que hacían, a los que tenía como referentes.

 

En 1990, cuando estaba a punto de cumplir 13 años, la Federación Española le concedería una beca para estudiar y entrenar en un centro de entrenamiento para grupos de edad. Ubicado en el Colegio Cerrado de Calderón en su ciudad natal bajo la dirección y tutela de Fernando Tejero. Su primer gran éxito llegó esa misma temporada, que finalizó proclamándose campeona de Europa Junior en el 200 mariposa, en agosto de 1991. Repitió éxito en el Europeo Junior de 1992, tras haber participado, con sólo 14 años, en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, como la deportista más joven del equipo olímpico español. La nadadora nos cuenta "Conocí los Juegos Olímpicos por inmersión. Era sólo una niña de 14 años y prácticamente ni había visto los Juegos Olímpicos por televisión. Mis hermanas mayores, que eran mis ídolos y referentes, eran las que me habían hablado de los Juegos y habían soñado con ellos antes que yo, terminaron por vivir el sueño olímpico a través de su hermanita". 

 

Después de 6 años en el centro de entrenamiento del Cerrado de Calderón, tras participar en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, María se traslada a Madrid, siguiendo a su mentor, Fernando Tejero. Sigue con una beca de la Real Federación Española de Natación, en el Centro de Alto Rendimiento Blume, en el que sigue compatibilizando su preparación deportiva con sus estudios, esta vez universitarios. "No tenía muy claro qué quería estudiar, opté por INEF (entonces Licenciatura en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte) porque estaba relacionado con el deporte, que ya era mi vida, y además la facultad estaba en el mismo recinto del CAR, junto al CSD". "La adaptación a Madrid fue un poco dura, aunque ya llevaba años viviendo fuera de casa, en Málaga sabía que tenía la familia a 10 minutos. Pensaba que aunque no hubiese sido por la natación, seguramente me hubiese ido de Málaga para estudiar una carrera fuera, como ya habían hecho mis hermanas mayores, pero echaba mucho de menos a la familia y el mar". El cambio fue muy positivo y el esfuerzo tuvo su compensación, al finalizar esa temporada María se proclamó campeona de Europa en 200 mariposa en categoría absoluta, siendo la primera mujer española en conseguir tal gesta en natación, y con toda su familia presente, pues el campeonato europeo de 1997 se celebró en Sevilla.

 

En el año 2000, tras los Juegos Olímpicos de Sydney, cambia de entrenador "En Sydney tenía unas expectativas muy altas, pero el año no estaba siendo bueno, principalmente porque había perdido la confianza en mí misma, pero también sentía que había terminado el ciclo con Fernando. Hablé con él y me dijo que lo entendía. Llevábamos 10 años juntos, había pasado con él tantas o más horas que con mi padre, así que fue duro tomar la decisión". La nadadora entrenó otros dos años en Madrid, con Juan Carlos Rodríguez como técnico.

 

 

En el verano de 2002 María toma la decisión de cambiar, no sólo de técnico, sino de lugar, y se traslada a Verona (Italia) para entrenar con Alberto Castagnetti, el que fuera seleccionador italiano por más de 20 años, y Stefano Morini. Allí recuperó confianza, alegría y ambición. Consiguió volver a las grandes competiciones clasificándose para el Campeonato del Mundo de Barcelona 2003 y al año siguiente para sus cuartos Juegos Olímpicos, Atenas 2004. En Atenas nadó la semifinal de 200 mariposa y la ansiada final olímpica, con el relevo de 4x100 estilos.

 

Tras los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 regresa a Madrid, entrena una temporada bajo la dirección de Paulus Wildeboer becada en el CAR Blume como externa. Al año siguiente continúa como externa en la Blume, pero preparándose a las órdenes de Joan Fortuny. La temporada 2006-2007 la inicia también en el CAR Blume con Jordi Murio, pero por desacuerdos con el entonces director técnico de la RFEN, termina por dejar el CAR a los 2 meses de iniciada la temporada "Fui a hablar con Juan Camus, entrenador con el que entrenaban nadadores de diferentes clubes, aparte de los del suyo, el Club SEK, lo primero que Juan me dijo fue que si queríamos ir a lo Juegos Olímpicos teníamos que trabajar así y asao... para mí, Juan había dicho la palabra mágica, hablaba de Juegos Olímpicos y aquello hizo que me pusiera en sus manos al 120%".

 

En 2008, y tras un cambio de prueba a mitad de temporada, María realiza el tiempo que la FINA (Federación Internacional de Natación) exigía para participar en los JJOO de Pekín en los 200m estilos. Su convocatoria dependía del director técnico, que opta por incluirla en la selección. María fue a sus quintos Juegos Olímpicos, los de Pekin 2008.

 

Tras sus quintos Juegos Olímpicos María siguió entrenando aún dos temporadas, en diciembre de 2009 consiguió hacer su último récord de España, en su prueba preferida, los 100m estilos, con 32 años; separado 18 años de su primer récord de España, que había realizado con sólo 14, en 200m mariposa.

 

María Peláez se retiró en diciembre de 2010, tras nadar en Palma de Mallorca el campeonato de España de piscina de 25m, en el que no pudo defender el título de campeona de España en la prueba en la que ostentaba el récord de España, el 100 estilos, por no haber realizado la marca necesaria en los 365 días anteriores al evento como señalaba la normativa para participar, su récord databa de 366 días antes...